Pan de mantequilla y semillas de amapola

Llevo una buena temporada sin poner recetas de pan y no es que lo haya dejado de hacer.  He conseguido panes deliciosos, como una chapata que he modificado porque no tenía algún ingrediente y ciertamente me quedó muy bien y estaba deliciosa, pero la comimos antes de que pudiese hacer fotos y es que no sé por qué estoy un poco perezosa para esto de las fotos.  Pero ahora volviendo al tema de que hace tiempo que no pongo nada de pan y aprovechando estos días "fresquitos" en que tanto apetece estar en casa y el calor del horno no viene nada mal, pongo una exquisita  receta de pan.  Por supuesto a unos puede gustar más que a otros y los resultados que obtenemos no pueden ser los mismos ya que en gran medida va depender del horno en que lo cozamos. Yo he hecho la misma receta en dos hornos diferentes y para nada salen igual.  Así que espero os guste.  Este pan es muy adecuado para desayunos, para hacernos un rico bocadillo de pan suave y tierno... 

PAN DE MANTEQUILLA Y SEMILLAS DE AMAPOLA
Ingredientes basados en 1 kilo de harina:
500 gr. de harina fuerte
500 gr. de harina floja
100 gr. de  mantequilla
1/4 litro de leche
1/4 litro de agua
60 gr. de levadura fresca
10 gr. de azúcar
10 gr. de mejorante panario (opcional)
24 gr. de sal
huevo batido y semillas de amapola 

Preparación: Poner en el bol de la batidora o en un bol para amasar a mano,  las dos clases de harina y desmenuzar en pedacitos la levadura fresca. Añadir la leche, el agua, el azúcar, la mantequilla y el mejorante panario si se usa. Amasar unos minutos y añadir luego la sal. Volver a amasar hasta que esté fina y elástica. Tapar el bol y dejar reposar la masa 1 hora o bien dejar en la nevera bien tapado de un día para otro.  Yo lo suelo hacer así, ya que me gustan más como quedan las masas.  Una vez reposado o en el momento en que vayamos a hacer el pan pesar porciones de 70 gr. y bolear. Reposar las bolas durante 15 minutos bien tapadas. Luego estirar y formar cilindros, enrollar desde los dos lados, uno hacia arriba y otro hacia abajo y formar las piezas, aunque cada uno puede darle la forma deseada.  A mí me gusta hacerlos individuales porque luego también los congelo y voy sacando. Pincelar con huevo bien batido y cubrir ligeramente la superficie con semillas de amapola . Fermentar en un lugar cálido y sin corrientes de aire hasta que doblen su volumen. Entonces cocer en el horno a 190º  C durante 10-15 minutos. Eso depende de los hornos. Una vez dorados, dejar enfriar sobre rejilla antes de consumir.